Se creó una mesa de trabajo en el Concejo Deliberante para abordar problemáticas del Delta

Por Sabrina García

Lo que para una calle es el bacheo, el dragado es para ríos y arroyos. Una lancha puede romper motor o hasta la carcasa de la embarcación si un trozo de árbol o sedimento acumulado golpea en el fondo. Sin embargo las obras de dragado nunca llegan y cada vez es más peligroso navegar ríos y arroyos.

Las obras de dragado son responsabilidad del Ministerio de Infraestructura de la Provincia de Buenos Aires. El caso más emblemático es el del arroyo Caracoles. La falta de obras impedía el ingreso al curse del río cuando había bajante, y eso motivó que en febrero pasado se cerrara la escuela. Es decir, en lugar de dragar así la escuela funcionaba correctamente y las familias que allí residen no quedasen encerrados, se procedió a la clausura. Un mes más tarde el establecimiento educativo se abrió tras la lucha de los vecinos pero el conflicto de los ríos y arroyos tapados persiste.

Durante la semana, el concejal de Unidad Ciudadana, Nacho Álvarez, posteó una foto que refleja el estado de los cursos de agua y dijo: “Para encontrar soluciones a los problemas de nuestros vecinos es imprescindible que trabajemos juntos, sin mezquindades, poniendo en el centro de la escena las necesidades e intereses de los sanfernandinos”.

“Ante el reclamo de los vecinos del Delta sobre la falta de dragado, limpieza y destronque de ríos y arroyos, desde el Concejo Deliberante pudimos conformar una mesa de trabajo que de respuestas para solucionar temas históricos como la accesibilidad y el impacto ambiental de esta problemática. Es una cuestión moral y hay que tratarla como tal porque implica riesgos para los habitantes del Delta, y dificultades en relación al acceso a la educación y la atención de la salud”, describió el legislador local.