INFORMACIÓN GENERAL
Profundo dolor en la despedida de los restos de Miguel Gómez

Por Sabrina García
Ayer se despidieron los restos del chofer de la patrulla comunal Miguel Gómez. Una importante caravana con sirenas que llamaban la atención de los vecinos, acompañó el cortejo fúnebre que recorrió distintas zonas de nuestra ciudad.
A lo largo del día las redes sociales fueron una caja de resonancia de lo que ocurrió durante el último adiós a Miguel Gómez. Nadie que ayer estuviera en San Fernando estuvo ajeno a la despedida del chofer de la patrulla comunal asesinado el domingo pasado.
Las sirenas captaron la atención y la importante caravana abrió paso al cortejo fúnebre, en lo que fue un sentido homenaje al trabajador municipal.
La causa
En tanto, se conoció más información sobre la investigación que lleva a cabo el fiscal en la causa, Alejandro Musso. La detención de Pablo Julián Rojas (22), principal sospechoso del crimen, fue realizada por efectivos de la SubDDI de Tigre y de la comisaría 1ra. de San Fernando cuando merodeaba un domicilio de la calle Piñeyro y la ruta 8, en Grand Bourg. Hasta allí había ido a buscar plata porque pensaba fugarse al interior del país. Cuando vio a los policías, Rojas intentó escapar. No lo logró.
Al momento del arresto, los policías le secuestraron un revólver Magnum calibre .44 y una escopeta tipo Ithaca calibre 12/70. Luego, hallaron una pistola calibre .45 que el sospechoso había descartado en un descampado de San Fernando y, se presume, fue la utilizada para asesinar a Miguel Gómez (29).
“Tras tareas investigativas, sabíamos que este sospechoso pensaba encontrarse con un amigo que le iba a dar dinero para fugarse a otra provincia”, dijo uno de los jefes policiales que participó de los operativos, quien además señaló que “de manera cautelosa hicimos una vigilancia encubierta en la zona hasta atraparlo”.
La clave para llegar a Rojas es que posee antecedentes, figura también en los registros penitenciarios con el apellido Guipponi y se realizó el seguimiento de una serie de imágenes de cámaras de seguridad en donde se observaban tanto los momentos previos al crimen y posteriores a la fuga de los sospechosos.
A partir de las imágenes un testigo identificó a una de las chicas que se hallaba con el autor de los disparos. Los investigadores analizaron el muro y contactos de la red social Facebook de esta chica y, así, se llegó al principal sospechoso, al que identificaron como Julián Rojas. “Quedó claro que tanto las dos chicas como el joven que acompañaban al imputado no tuvieron nada que ver con el crimen. Rojas estaba armado sin que ellos lo supieran”, explicó una fuente judicial.
Las chicas que acompañaban al acusado contaron que habían conocido a los dos jóvenes por Facebook y esa noche habían acordado una salida al río. El análisis de los contactos del Facebook de estas jóvenes que terminaron siendo testigos y están desvinculadas del crimen, al igual que el compañero de Rojas, fue clave para identificar y rastrear al imputado.
“Luego del hecho, Rojas escondió la pistola en un arbusto donde la secuestramos, se fugó de su domicilio en Virreyes y se refugió en la casa de una conocida hasta que lo atrapamos en Grand Bourg”, añadió la fuente.
Julián Rojas tiene antecedentes penales por drogas, estuvo preso en una causa de menor y ahora quedó a disposición del fiscal Musso, quien lo indagará por la tentativa de homicidio en el caso del policía y el homicidio del trabajador municipal Julio Gómez.
Fuente consultada: Télam y Facebook