INFORMACIÓN GENERAL
La búsqueda de su identidad: nació en el Delta sanfernandino y 50 años más tarde encontró a su madre
La búsqueda se inició a partir de la necesidad de Marcela por encontrar a su madre. Tenía algunos datos: nació en el Delta sanfernandino en junio del ’71, su madre era empleada doméstica en la casa de quien sería su padre biológico, había un vínculo con un aserradero de Tigre.
En septiembre de 2023, Marcela, de 52 años, tomó contacto con el Programa de Derecho a la Identidad Biológica de la Defensoría del Pueblo de la Nación. Tenía retazos de su historia y buscaba su identidad.
Marcela tenía algunas piezas de su historia, información que le brindó María Marta, su madre de crianza: nació en junio de 1971 (alrededor del 14) en un hospital de nuestro delta, su madre biológica la había dado en adopción y que la fueron a buscar en una lancha taxi.
Sumado a esos datos, Marcela tenía la información de que su mamá biológica trabajaba -por aquel entonces- como empleada doméstica en la casa de quien sería su padre biológico y que había un vínculo de sus padres vinculado a un aserradero, ubicado en Tigre.
La partida de nacimiento de Marcela indicaba que había nacido en la Ciudad de Buenos Aires.
Con toda esa información la Defensoría del Pueblo comenzó con la búsqueda. En primer lugar, buscar en los libros de parto de los hospitales de isla de San Fernando a una niña nacida en junio de 1971. La respuesta llegó en diciembre del 2023. En el libro del Hospital Dr. Oscar do Porto (Río Paraná de las Palmas y Río Carabelas – 2da sección) hubo tres partos en ese mes: un niño y dos niñas. Descartado el varón, quedaban las dos niñas, pero de una de ellas se observó un dato que llamó la atención de los investigadores de la DPN.
El 17 de junio de 1971 una mujer de 26 años llamada Mónica B., de estado civil soltera, había dado a luz a una niña de 3,7 kg. El domicilio que la madre había registrado en el Hospital era de un aserradero, en Carapachay.
La coincidencia de la fecha y el dato del aserradero indicaba que quizás se trataba del parto de Marcela. Es así que la DPN solicitó nuevos informes para dar con el paradero de una mujer llamada Mónica B., nacida entre 1943 y 1949.
La respuesta llegó el 31 de enero de 2024. Una mujer de nombre Mónica B., nacida en mayo de 1945 en la provincia de Entre Ríos y con último domicilio declarado en Montecarlo, Misiones. No había registro de número telefónico, sí una fotografía y su último domicilio declarado.
El delegado de la DPN en Misiones indagó con diversas fuentes para dar con el paradero de Mónica B., pero nadie sabía de ella. Entonces se decidió pedir colaboración a la Policía de la Provincia de Misiones para que ubicara a Mónica.
En julio de 2024, la Defensoría recibió un llamado: una mujer se identificó como la nuera de Mónica B. y que respondía al pedido de contacto que le transmitió la policía.
La primera vez que la DPN se comunicó con Mónica B. para consultarle sobre el caso que investigaba ella respondió: “¿Si tuve una hija?. Sí, hace mucho tiempo, pero nació muerta” y agregó que por aquel entonces ella trabajaba como empleada doméstica en el aserradero y había dado a luz a la niña en el Dr. Oscar do Porto.
Frente a tantas coincidencias de los relatos de ambas, Mónica B. aceptó realizarse un cotejo de ADN que confirmó el vínculo biológico entre ellas. Reestablecida su identidad, ahora es tiempo de Marcela para rearmar la historia que le pertenece.
Fuente consultada: DPN