En el río es mejor

Por Carlos Sanabria @hayquearar

Se agitó el avispero político en nuestra ciudad. Lejos aún de las elecciones donde el andreottismo tendrá que revalidar su gestión, el municipio decidió no renovar la concesión de los terrenos a la empresa Marina del Norte SA con la intención de ampliar su costanera. El domingo 28, convocada mediante redes sociales, se realizó una mateada frente al predio clausurado para dar apoyo a la decisión gubernamental. A continuación, reflexiones y sensaciones en una tarde llena de reposeras, termos y política.

“Re pacífico, ¿no?”, ella sonríe mientras termina de escribir unas cartulinas que servirán de decoración para la primera protesta de vecinos y vecinas de San Fernando contra el empresario Hugo Schwartz, dueño de ‘Marina del Norte’. “La costanera es de los vecinos, no se vende ni se alquila”, se lee en los carteles y sirven para explicar el conflicto entre el Municipio de San Fernando y el dueño de la empresa que hasta el último 31 de diciembre tenía la concesión de diez hectáreas costeras ubicadas en Del Arca y el río Lujan donde funcionaba una guardería náutica y un salón de fiestas.

“Un intendente contra empresario náutico”, fue el titular elegido por la mayoría de los medios para dar cuenta de este conflicto. Si, en tiempos de vigencia de la ‘apolítica’, de la sonrisa fácil y las frases de ocasión, en el norte del conurbano vuelve a emerger la palabra política. Cargada de sentido y útil no solo para arbitrar en conflictos sociales, sino para asumir una postura ante esos conflictos. “Muchas veces para elogiar al intendente, lo describen como un ‘buen administrador’ sin embargo para mí es un gran político. Esta es una pelea que vale la pena dar porque la política puede transformar la vida de las personas y es injusto que un empresario lucre con un terreno que les pertenece a todos”, afirmó Juan Andreotti, diputado provincial e hijo del intendente electo en 2011, Luis Andreotti.

La convocatoria iniciada en redes sociales, etiquetada como espontánea, fue a participar de una mateada frente a la entrada de Marina del Norte el domingo 28 a las 16. Detrás de unos tablones negros donde brillaba la faja roja con la palabra “clausurado”, un centenar de personas se juntaron para pedir por la ampliación de la costanera sanfernandina. Bajo un cartel que denunciaba el “atropello de las autoridades municipales de San Fernando” y mostraba una resolución judicial que permitiría la continuidad de la actividad de Marina del Norte SA, afloraron originales cantitos que acompañaron los aplausos vespertinos. Al clásico “¡queremos la costanera! ¡queremos la costanera!”, le siguieron un intenso “ohhh, la costa va a volver…” y un “yo quiero mi costanera, necesito mi costanera, y el ruso que se vaya que se vaya…” al ritmo de Sumo.

“Esta disputa no es por el espacio público, sino por la caja”, declaró en las últimas semanas Hugo Schwartz en el medio QuePasaWeb. Y la verdad que detrás de un posible beneficio para los vecinos y vecinas de San Fernando por supuesto que emerge la intención de obtener recursos que podrían ser utilizados para mejorar la calidad de vida de las personas que viven en el municipio. Esto no debería sonrojar a nadie. Y menos cuando Marina del Norte SA tributa mensualmente solo 7 mil quinientos pesos por mes. Tampoco le quitaría legitimidad al reclamo el hecho de que a futuro sea el propio municipio quien organice actividades y difunda masivamente esta situación en caso de un revés judicial.

Con el correr de las horas, el agua de los termos se fue acabando y la mateada se convirtió en marcha. Es la política, y volvió para quedarse. “Este es un primer paso, nosotros vamos a organizar y acompañar esta lucha de manera pacífica”, afirmó Juan Andreotti. ¿Se enfriarán los mates y habrá algún acuerdo con Schwartz? ¿O subirá la temperatura y no alcanzará con las mateadas? El sol del domingo se despide y se despega el último cartel. “Basta de negocios para los ricos”, dice. Con el río de fondo, qué lindo que suena.

Foto: gentileza San Fernando Municipio