El Chino Luna sorprendió a los chicos de un merendero del barrio Villa del Carmen

Por Sabrina García

El Chino Luna visitó de sorpresa un merendero del barrio Villa del Carmen. Les sirvió la merienda, dialogó con ellos, jugó al fútbol, se sacó fotos y firmó camisetas.

“Ayer tuvimos la visita del Chino. Los chicos estuvieron más que felices con su sorpresa”, expresó María Teresa, una vecina del barrio Villa del Carmen que abrió las puertas de su casa para que tres veces a la semana más de 60 chicos vayan a tomar la merienda.

‘Panza llena, corazón contento’ comenzó a funcionar hace un año. “Un día vinieron unos chicos y me pidieron algo para tomar, les preparé la leche, eran seis. Al otro día volvieron, eran 10 y así. Llegamos a abrir el merendero todos los días hasta que se nos hizo imposible”, cuenta María Teresa y explica que en la actualidad asisten más de 60 chicos de los barrios Villa del Carmen, San Ginés y San Roque. Funciona los lunes, miércoles y viernes. “Como es en el comedor de mi casa, que no es muy grande, entran 26. Por eso entran por tandas, a medida que van llegando les sirvo la merienda”.

María Teresa hace torta fritas, pan casero y rosquitas para vender. “Vamos con mi hija a las panaderías cuando cierran y nos dan facturas o pan que sobró del día. Si un día no sobró saco de lo que hago para vender”, dijo Teresa.

Hace un mes organizaron el festejo del Día del Niño y repartieron unos volantes por el barrio que llegaron a La Damasia. Vecinos de ese barrio privado se enteraron y comenzaron a colaborar. “Los lunes viene un grupo de vecinos del barrio y nos traen leche en polvo, zucaritas, yerba, azucar, chocolatada, galletitas. Lo que puedan. Cada semana viene un grupo distinto. Ellos se organizan por WhatsApp y vienen muchas veces con sus hijos”.

Una de esas vecinas le avisó al Chino Luna que muchos chicos van al merendero con la camseta de Tigre. Es así que de sorpresa el Matador se presentó en el merendero. “No lo querían dejar ir. Compartió ese rato con ellos, les sirvió la merienda, charló, jugó con ellos, tomamos mates, le firmó carpetas y camisetas”, detalló Teresa y agregó: “La verdad la pasamos muy bien. Es una persona con una humildad como la nuestra, sencillo”.

El merendero

Nació en 12 de agosto de 2018. El nombre de gestó una de las veces que los chicos habían terminado de merendar. “Panza llena, corazón contento, no?”, les dijo Teresa y la respuesta de los chicos fue sí. Y esa anécdota sirvó para darle entidad al merendero.

Asisten chicos de los barrios Villa del Carmen, San Roque y San Ginés. Solamente meriendan adentro de la casa de Teresa cuando “llueve o hace frío”, sino aprovecha el jardín de su casa en donde también juegan al fútbol.

El año pasado celebraron el día del niño, navidad y reyes. “Pudimos regalarles juguetes usados que estaban en buen estado”, recuerda Teresa y agrega que junto a su hija, que es la principal colaboradora, hicieron flores de papel para que los chicos les regalen a sus madres para el Día de la Madre, arbolitos de navidad. “Lo hicimos entre las dos. Queríamos que cada chico se lleve algo”.

A partir del último día del niño, cuentan también con la colaboración de algunos vecinos del barrio La Damasia.

El merendero funciona los lunes, miércoles y viernes a partir de las 16.30 horas en Amancio Alcorta 1420.