Declaró el tío de Wanda Nara: “Las chicas se sentían atraídas por mí, me veían como un superhéroe”

Carlos Colosimo está acusado de abusar de al menos tres compañeras de colegio de su hija, todas menores de 14 años. Fueron sometidas a “manoseos” desde los ocho años. Una de las víctimas rompió el silencio en una clase sobre derecho a la intimidad.

“Las chicas se sentían atraídas por mí, me admiraban, me veían como un superhéroe”, declaró ayer Carlos Colosimo, tío de Wanda Nara, detenido el miércoles en Boulogne, acusado de abuso contra al menos tres amigas de su hija, menores de 14 años y alumnas del tradicional colegio católico de San Isidro Nuestra Señora del Refugio. El fisicoculturista y personal trainer de 46 años dijo que las nenas lo denunciaron “por despecho”. Está acusado de “abuso sexual agravado ultrajante, tentativa de violación y exhibiciones obscenas”. Hasta ayer, tras declarar en los Tribunales Federales de San Isidro, se encontraba detenido en la Dirección Departamental de Investigaciones (DDI) de ese distrito, en Tomkinson y Juan Segundo Fernández.

“Ante los hechos de público conocimiento sucedidos en el día de ayer, deseamos expresar que estamos trabajando intensamente en la contención de los alumnos, aportando todo lo que está a nuestro alcance en el marco institucional”, señalaron desde la institución a través de un comunicado firmado por Atilio Alberto Peña Pirovano y María Mercedes Gambini, representantes legales del colegio. Peña Pirovano contó en los medios que la olla se destapó cuando una de las alumnas confesó, después de una clase de Construcción Ciudadana, que Colosimo la había “manoseado”. Esto permitió que otras dos estudiantes se animaran a decir que habían pasado por la misma situación.

En su declaración en cámara Gesell, la menor que se atrevió a hablar primero contó que tras esa clase, en la que se debatió sobre derecho a la intimidad, se puso a llorar. Esto hizo que una docente y una psicopedagoga intervinieran. Fue entonces cuando relató que había sido “manoseada” reiteradas veces por Colosimo, tanto en su casa como en una lancha en la que llevaba a las niñas a navegar por el Delta.

La menor contó que el sospechoso abusó de ella desde que tenía ocho años y que lo hacía cuando no estaba su mujer (de quien está separado, aunque seguían viviendo juntos). Incluso relató que vio varias veces a Colosimo manipular armas. Ella y las otras dos nenas que se animaron a denunciar habrían dado el nombre de al menos dos compañeritas más, una información que es investigada por el fiscal Eduardo Vaiani.

Durante el allanamiento a su casa, que se llevó a cabo el miércoles, se secuestraron seis armas de fuego y varios cartuchos cargados, además de teléfonos celulares y una computadora netbook, informó a El Argentino Zona Norte Sergio Rodríguez, comisario mayor de la DDI de San Isidro. La lancha, amarrada en el Yacht Club de San Fernando, también fue allanada, pero sólo se tomaron fotografías y videos.

Fuente: Lorena Tapia Garzón para El Argentino