¿Se terminó la era Pipo Gorosito en Tigre?

El año pasado Pipo protagonizó una novela entre Tigre y San Lorenzo que incluyó un audio filtrado en donde el técnico de Victoria anunciaba su deseo de dirigir el equipo de Boedo. ¿El resultado? Gorosito no se fue y se enojó con la prensa porque había publicado sus idas y vueltas. Tras la derrota frente a All Boys y la salida del técnico del Ciclón, Diego Monarriz, vuelve un nuevo capítulo sobre la posible salida de Tigre y el ingreso de Pipo en el equipo de Marcelo Tinelli. 

La relación entre Néstor Gorosito y los jugadores de Tigre se quebró en noviembre del año pasado. Un mal comienzo del equipo en la Primera Nacional y los problemas para adaptarse a la categoría; los rumores que se confirmaron con un audio del propio Pipo en donde anunciaba su deseo de dirigir a San Lorenzo a raíz de la partida de Juan Antonio Pizzi; dieron como desenlace un quiebre en la relación del técnico con sus jugadores.

La catarata de críticas que recibió Pipo por parte de la hinchada de Tigre sobre su salida motivada por el deseo de dirigiar a San Lorenzo, así quedó expresado en el audio que ¿se filtró?, y habiendo sido testigo de lo complicado que es ponerse en contra a la gente de su distrito (cuando Tigre no salió a jugar el segundo tiempo en San Pablo por la Copa Sudamericana padeció el destrato y agresiones por la gente de Tigre que llegaron a llamar a su casa insistentemente para insultarlo), lo llevó a recalcular y quedarse en Victoria. “Pensábamos que el técnico debía ser Pipo pero no se pudo dar. Lo queríamos tener rápidamente y no se dio”, había explicado en su momento Marcelo Tinelli, presidente de San Lorenzo.

Lo cierto es que anoche Tigre jugó mal, el desgaste con el plantel es evidente. Como si fuera poco, en el reinicio de la competencia apenas sacó tres de los nueve puntos posibles (2-0 a Rafaela). Por eso, tras la derrota con el All Boys (1-2), Gorosito vuelve a ser noticia. Sí, se repite la historia: los rumores indican que dejaría su cargó en Tigre para irse a dirigir a San Lorenzo, que casualmente se quedó sin técnico.

Fuente consultada: Olé