DEPORTES
Un Tigre que volvió a perder el rumbo
Un Tigre errático perdió ante Boca Juniors en La Bombonera por 2-0 en el marco de la decimoquinta fecha del torneo de Primera División. El delantero Emmanuel Gigliotti marcó los dos tantos del conjunto que dirige Rodolfo Arruabarrena, a los 26m. y 38m. de la segunda mitad. Con esta derrota Tigre, que tiene un encuentro postergado (en realidad son 45 minutos del duelo que empataba sin goles con Lanús, en Victoria), sigue con 17 puntos.
El desarrollo del primer tiempo fue anodino. El equipo de Gustavo Alfaro esperó atrás, intentó cortar los circuitos futbolísticos de su adversario y cuando pudo trató de meter la estocada de contra.
Estuvo cerca al minuto el ‘Matador’, con una escapada del colombiano Sebastián Rincón, quien metió un remate cruzado que salió apenas desviado, junto al poste derecho de Agustín Orión.
Boca empezó a reagruparse en el medio y controló el juego con las criteriosas labores de César Meli y Andrés Cubas. Pero al local le faltó profundidad en los metros finales y así ese ligero predominio se volvía inofensivo.
Pese a ello, el conjunto auriazul tuvo sus oportunidades como un remate del chileno Fuenzalida (19m.) que salió al costado del palo derecho; una media vuelta de Gigliotti que se fue arriba (37m.) y un cabezazo del goleador, tras centro de Nicolás Colazo, que besó el poste izquierdo (44m.).
En la segunda mitad, el panorama no se modificó demasiado. Sólo que el equipo de Alfaro se apuró en su postura de protegerse en su campo y, prácticamente, se resignó a la posibilidad de la contra.
Apenas tuvo una clara el elenco visitante, a los 14m., cuando Leandro Garate le pegó alto desde una posición propicia.
El ingreso del goleador Andrés Chávez le dio otra dinámica y verticalidad al ataque xeneize. Y el ex Banfield fue determinante en la obtención de la primera conquista.
A los 25m., Chavez encaró por izquierda ante Erik Godoy y el zaguero central visitante fue al piso para intentar despejar. En la pretensión de mandar la pelota afuera, el defensor pudo haber desacomodado al goleador y eso creyó ver el árbitro Germán Delfino.
La ejecución, a cargo de Gigliotti, comprendió un disparo sobre la derecha, hacia allí fue García, que rechazó pero dio un rebote largo que el propio ex jugador de All Boys y San Lorenzo mandó a la red con un remate fuerte.
Con la ventaja consumada, Boca siguió insistiendo y logró aumentar la cuenta a los 38m., cuando Chávez escapó por izquierda y envió un centro que conectó Gigliotti: el remate del delantero rebotó en Juan Carlos Blengio, descolocó a García y se tradujo en el segundo.
Fuente: Télam