Allanaron una vivienda en Victoria tras el escándalo del vuelo de Xipolitakis

Por Sabrina García

La morada pertenece al copiloto Federico Soaje. Tras el escándalo protagonizado por la mediática Victoria Xipolitakis, el piloto y copiloto del vuelo de Austral 2708 fueron echados de la compañía, se iniciaron acciones judiciales y se allanaron sus viviendas.

Los efectivos de la Policía de Seguridad Aeroportuaria (PSA) allanaron las viviendas de Federico Soaje y Patricio Zocchi, en las localidades de Victoria y de Beccar, respectivamente. Ambos fueron fueron echados de la compañía y están imputados.

Federico Soaje (37) vive en el barrio Los Fresnos, en la ciudad de Victoria. En su perfil de Linkedin se define como Piloto Comercial de primera clase, ex Oficial Piloto del Ejército, Instructor de Vuelo en la Aviación Civil y Militar. Posee habilitación multimotor y de Aeronaves propulsadas por Turbohélice. Ingresó a trabajar en la empresa Austral en febrero del 2011.

Por su parte, el copiloto del vuelo Patricio Zocchi (33) es quién invita a la vedette a la cabina y le pregunta si lo que está filmando lo llevará a la televisión: “Mirá Vicki, yo me voy a hundir pero vos te venís conmigo”, se escuchó entre otras frases y risas. El copiloto ingresó a la empresa en 2006 y, con unas 5 mil horas de vuelo a cuestas, fue ascendido a comandante hace poco más de un año. Está casado con María Belén De Olazábal, una azafata de Aerolíneas Argentinas. En noviembre, el matrimonio se mudó a una casa de Beccar y hace unos 15 días tuvieron un bebé.

En la tarde de ayer, Soaje, Zocchi y la vedette, quedaron imputados por una posible infracción del artículo 190 del Código Penal, que prevé una pena que va de dos a ocho años de prisión.

“Hasta donde sabemos, la señorita (Victoria) Xipolitakis no es una piloto habilitada”, expresa la denuncia presentada por la compañía Austral Líneas Aéreas ante el juzgado federal Nº12, a cargo de Sergio Torres.

Mientras ésto ocurría 36 pasajeros del vuelo de Austral 2708, con destino a Rosario, ignoraban que su vida estaba en manos de una “pilota” improvisada. Se conoció que al menos 11 pasajeros el lunes se presentarán como querellantes, y cada uno de ellos pedirá una indemnización de unos 250 mil pesos por daño moral y psicológico y por haber puesto en riesgo su seguridad.

El incidente ocurrió el lunes 22 de junio, pero tomó estado público este jueves por la noche cuando se difundieron las imágenes y el video de Xipolitakis comandando la aeronave mientras bromeaba con los responsables del vuelo. “Fui una pilota más, manejé el avión. Me dieron para acelerar, toqué el volante”, contó con ingenuidad a la prensa.

Hasta este momento, los legajos de Zocchi y Soaje estaban limpios, según confiaron fuentes relacionadas al caso. Ahora, enfrentan la posibilidad de la condena y el fin de su carrera en el aire. Ambos trabajaban para Austral Líneas Aéreas. Ganaban entre 45 y 50 mil pesos mensuales.

Fuente consultada: Perfil, La Nación, Linkedin y La Nueva

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